Alessandro Battini es un Client Manager del equipo de Milán que ha progresado en su carrera profesional a lo largo de cuatro años en la empresa, habiendo empezado inicialmente como Consultor Junior y avanzado hasta un puesto de nivel Senior. En esta entrevista, exploramos varios temas, entre ellos la evolución del sector, la diversidad en el lugar de trabajo y las tendencias previstas para el próximo año.
¿Podría describirnos su función como Gestor de Clientes?
Como gestor de clientes, mi papel tiene dos vertientes. En primer lugar, soy el principal punto de referencia para el cliente, y mi objetivo es garantizar que cumplimos las normas de entrega más estrictas. En segundo lugar, me esfuerzo por establecer una relación sólida y de confianza con el cliente, que pueda desarrollarse con éxito a lo largo del año.
Esta función es dinámica y versátil, lo que me exige ser capaz de resolver problemas de manera eficaz en el tiempo y apoyar las decisiones con una fuerte mentalidad consultiva. En resumen, nunca hay un momento aburrido en mi trabajo como gestor de clientes.
Llevas bastante tiempo trabajando en Kilpatrick y has pasado de becario a gestor de clientes. Podría explicarnos cómo ha experimentado este crecimiento dentro de Kilpatrick?
Desde el momento en que me incorporé a Kilpatrick, sentí un fuerte sentido de la responsabilidad y la expectativa de aportar valor añadido. Esto me motivó a fijarme un objetivo a medio plazo y a esforzarme por rendir al máximo de mi potencial, iniciando así una trayectoria de crecimiento dentro de la empresa.
Mi desarrollo ha sido posible gracias a la combinación adecuada de formación inicial y autonomía para tomar decisiones desde el principio. Este enfoque dinámico me ha permitido evolucionar y aprender de mis errores, que considero esenciales para un verdadero crecimiento profesional. En general, confío en que mi compromiso con la excelencia y mi voluntad de aprender seguirán impulsando mi éxito en Kilpatrick.
Echando la vista atrás y viendo el crecimiento que ha experimentado y los retos que ha superado, ¿qué consejo le daría a su yo más joven?
Mi consejo para los que empiezan su andadura profesional sería que escucharan las recomendaciones de los colegas más veteranos y aceptaran las críticas constructivas. Porque son ellos quienes pueden ayudarte a aprender y crecer, sobre todo en las primeras etapas de tu carrera.
Además, recomendaría hacer hincapié en su curiosidad desde el primer día, ya que esto le impulsará a adquirir un conocimiento profundo del negocio de la búsqueda de talentos. Mantener la curiosidad y tratar continuamente de ampliar tus conocimientos te llevará al éxito a largo plazo.
Por último, es importante ser proactivo y no tener miedo a asumir responsabilidades al principio de su carrera. Sólo así podrá desarrollar la ambición de ascender y crear un impacto real dentro de su organización. Si te haces cargo de tu trabajo y te esfuerzas por hacer una contribución significativa, demostrarás tu valor y potencial de crecimiento dentro de la empresa.
¿Cómo ha observado la evolución del sector de los cazatalentos a lo largo de sus años en el sector?
Después de haber trabajado en el sector de los cazatalentos durante algún tiempo, he observado cambios significativos, especialmente acelerados por la crisis pandémica.
Es importante reconocer que el trabajo del cazatalentos nunca ha sido fácil, pero en los últimos años nos hemos enfrentado a retos cada vez más complejos. El periodo de incertidumbre de los últimos años, y la consiguiente reticencia de las empresas a asumir riesgos, ha dado lugar a menos contrataciones, pero más selectivas, con aptitudes duras y blandas específicas. Esto ha dejado menos margen de flexibilidad para encontrar soluciones alternativas.
Paralelamente, esta actitud poco arriesgada ha ido acompañada de una reticencia similar entre los candidatos a presentarse y evaluar el mercado laboral. Sin embargo, creo que sólo las empresas con una visión a largo plazo, una diversificación internacional del negocio y un plan estratégico bien definido seguirán desempeñando un papel destacado en nuestro sector.
Mientras el sector de la búsqueda de talentos sigue evolucionando, confío en que si nos mantenemos adaptables y centrados en aportar valor a clientes y candidatos, podremos superar estos retos y seguir prosperando.
En cuanto a la diversidad, ¿qué cambios observa en relación con el talento extranjero? (¿buscan más las empresas en el extranjero, son más propensas a aceptar a personas extranjeras cuando son preseleccionadas?)
En cuanto a la diversidad, me complace observar que las empresas, ya sean multinacionales o PYME en transición de la fase empresarial a la de gestión, están cada vez más dispuestas a evaluar positivamente a los candidatos extranjeros.
Sin embargo, a pesar de la buena disposición de las empresas italianas, está claro que los candidatos extranjeros aún no muestran un interés significativo por el mercado laboral italiano. Los estudios realizados por la OCDE indican que Italia sigue figurando entre los países menos atractivos para los trabajadores altamente cualificados debido a la escasez general de personal altamente cualificado.
No obstante, el Gobierno está tomando medidas para aplicar políticas económicas que animen a los talentos extranjeros a considerar la posibilidad de trabajar en Italia. Una de esas políticas es la “Legge del Rientro dei Cervelli”, que concede atractivos beneficios fiscales.
Mientras las empresas y el gobierno siguen trabajando para atraer talento extranjero, es importante centrarse también en crear una cultura de diversidad e integración en el lugar de trabajo que valore y promueva la diversidad en todos los niveles de la organización.
¿Cómo se relaciona Kilpatrick con el tema de la diversidad y la inclusión?
Kilpatrick es una empresa que concede gran importancia a la Diversidad y la Inclusión, y estoy orgullosa de formar parte de un equipo que promueve activamente estos valores. Más de la mitad de nuestros consultores son mujeres, y en nuestro equipo están representadas diversas nacionalidades, con más de diez países diferentes.
Esta diversidad nos permite interactuar con diferentes culturas e intercambiar ideas y enfoques que han contribuido al crecimiento global de Kilpatrick. Al dar prioridad a estas cuestiones, podemos establecernos como un socio creíble y respetado por los clientes que comparten nuestros valores de inclusión y respeto de la diversidad.
Creo firmemente que la diversidad no es un elemento perturbador dentro de una organización, sino más bien una fuerza cohesiva que ayuda a toda la estructura a evolucionar y prepararse para futuros retos.
¿Podría señalar tres tendencias en los aspectos que los talentos más demandados buscan en un nuevo empleador y que las empresas podrían aprovechar?
Un reciente estudio realizado por Kilpatrick ha demostrado que el equilibrio entre vida personal y profesional es el principal factor que los candidatos tienen en cuenta a la hora de tomar una decisión sobre su futuro profesional. Esta tendencia es común en todas las generaciones de profesionales encuestados y se considera cada vez más un factor clave para retener el talento y desincentivar la rotación en las empresas.
Otra tendencia observada es el deseo de los candidatos de continuar con el smart working como forma de trabajo en el futuro. Esto es especialmente importante en determinados sectores, como el digital-first, y para algunos grupos de profesionales especializados. Las empresas que ofrecen flexibilidad en este ámbito serán más capaces de atraer y retener a los mejores talentos, lo que a su vez contribuye a mejorar el rendimiento.
Una tercera tendencia es la creciente atención de las nuevas generaciones a la visión y los valores de una empresa. No sólo les interesa el crecimiento profesional, sino también los valores y activos de la empresa. La atención prestada por los medios de comunicación a temas como la diversidad, la inclusión, el cambio climático y la sostenibilidad empresarial ha inspirado a las nuevas generaciones a adoptar estos valores como propios. Por lo tanto, es crucial que las empresas promuevan estos temas con planes concretos para asegurar el talento futuro.