Reconocer un error o debilidad, o bien una fortaleza, de forma consciente es el punto de entrada para aprender y generar mejoras de la mano de acciones concretas. De esto se trata justamente el liderazgo consciente.
A continuación te comentaremos más sobre este nuevo tipo de liderazgo, explicaremos sus características, las habilidades que hay en juego y los beneficios que esto reporta para las organizaciones y sus equipos.
¿Qué es el liderazgo consciente?
La clave de este liderazgo es justamente la consciencia del acto de liderar, es decir, para ser conscientes no basta solo con darnos cuenta sino también tenemos que ser capaces de reflexionar acerca de nuestras acciones, roles y repercusiones de las acciones que ejecutamos.
Este tipo de liderazgo implica que las personas a cargo de los destinos de una compañía se encuentren totalmente presentes, en sus funciones, con compromiso y en su rol. Y solo desde ahí poder tomar decisiones conscientes, generando confianza e inspirando a los equipos.
Algo esencial de quien ejerce un liderazgo consciente es que se responsabiliza por sus equivocaciones y aprende de ellas, analizando también os aciertos para así poder replicarlos. Todo esto se hace en pos de guiar mejor a los equipos y a la empresa.
Diferencia con el liderazgo tradicional
El liderazgo tradicional y el liderazgo consciente no se diferencian solo por una palabra. Mientras el primero se enfoca en el logro de resultados económicos, el liderazgo consciente pone el foco en que la generación de valor de la empresa se dé en tres aspectos, que son la rentabilidad, el desarrollo social y el cuidado ambiental.
Asimismo, el de tipo tradicional posee un líder que tiene como eje estos resultados y no en los atributos a la hora de ejercer sus decisiones, mientras que el de tipo consciente requiere de un líder que busca el autoconocimiento, y esto implica conocer sus fortalezas y debilidades, y en la importancia de tomar decisiones y actuar con responsabilidad social y ética.
Esta gran diferencia hace que el liderazgo consciente sea fruto de un proceso reflexivo en donde el líder se conoce a sí mismo para, desde ahí, conocer y aceptar a los demás. ¿El desafío? Promover y aplicar dentro de los equipos de trabajo los aspectos, cualidades y habilidades empresariales que hacen eco de un liderazgo consciente.
La importancia de un líder consciente
Un líder consciente es una figura que cada vez toma más realce en las empresas. La consciencia aplicada a la toma de decisiones en una organización es fundamental para liderar cambios positivos. ¿Por qué? Porque permite considerar diferentes variables involucradas.
De alguna forma el liderazgo consciente se basa en la idea de que los líderes conscientes pueden hacer y marcar una diferencia, y que pueden liderar a sus equipos hacia la excelencia, la felicidad y el bienestar.
Adoptar este enfoque por parte del líder es importante, pues puede tener un impacto significativo en la cultura de la empresa, en la satisfacción de los trabajadores y en el desempeño del equipo.
Características de un líder consciente
Un buen líder consciente no tiene solo que parecerlo, sino que serlo. Acá te dejamos algunas de las características generales que debe de poseer:
- Ser capaz de escuchar. No siempre es momento de hablar, sino que muchas veces el momento es el de escuchar. Y hacerlo de forma activa, atento a cada detalle que dicen las palabras y el cuerpo de los interlocutores.
- La importancia del ejemplo. Debes predicar y practicar al mismo tiempo cuando deseas ser un buen líder consciente, es decir, predicar con el ejemplo para que el equipo vea que tú eres la primera persona en ponerte en sintonía.
- Promover la colaboración. No tan solo incentivar el trabajo en equipo, sino que el colaborativo entre los miembros de la organización, y una sana competitividad.
- Capacidad de observación. No solo la acción es importante, cuando se es un líder consciente se debe tener la capacidad de poder tomar distancia y con ello perspectiva, poder observar y así ver si hay otras opciones y aportar nuevas ideas.
- Claridad. Las decisiones se deben tomar con claridad pues el equipo debe ver que estás seguro de tus actos y así generar la confianza necesaria con el equipo.
- La importancia de sonreír. Es importante transmitir tranquilidad y felicidad, aun cuando las circunstancias no sean las mejores. Se debe apostar por un equipo feliz, que se traduce en un equipo motivado y que rinde mejor.
- Asertividad. La comunicación de un líder consciente es asertiva de principio a fin, y expresa sus pensamientos e ideas de forma honesta y sencilla; con esto, cada miembro miembro del equipo sabe qué se espera de ellos, y a la vez ayuda a que tengan confianza y claridad en su vida laboral.
- Reconocer los errores. Lo decíamos al comienzo, un líder consciente se basa en el autoconomiento, y ese autoconocimiento implica reconocer los errores. Reconocer es la base para poder mejorar y cambiar, y esto no será visto como una flaqueza por parte del equipo, sino todo lo contrario: un líder humano que está en continuo perfeccionamiento.
Ventajas del liderazgo consciente
Si de beneficios se trata, hay varios que se pueden enumerar relacionados al liderazgo consciente, como los siguientes:
- Se comprende mejor la visión de la empresa. Implica identificar y calibrar los diferentes y más importantes aspectos de la organización para que el equipo de trabajo se enfoque en ellos. Quien ejerce un liderazgo consciente, considera los objetivos en función al propósito y visión empresarial.
- Desarrolla el talento. El liderazgo consciente se encarga de atraer a talentos a las compañías. Además, a través del desarrollo de buenas prácticas el talento elige quedarse, pues acá no se trata de retener.
- Mejora las relaciones en el trabajo. Ya decíamos que un líder consciente promueve el trabajo en equipo y, sobre todo, colaborativo de manera positiva. Cuando esto se da, los proyectos se dan mejor y se producen menos conflictos interpersonales pues se prioriza el rendimiento grupal más allá de las contribuciones personales.
- Aumenta la satisfacción laboral. No solo se trata de dirigir, sino que de motivar a los equipos. A ayudarlos a superarse y ser mejores, animándolos a que se conviertan en impulsores del cambio y la innovación en la empresa.
- Mayor productividad. Cuando los empleados son valorados y están comprometidos, motivados y satisfechos, disminuye la rotación y baja el ausentismo, lo que aumenta la productividad.
- Liderazgo inspirador. Se promueven habilidades blandas, que son las que nos permiten lograr mayor bienestar desde el interior hacia el exterior. Estar bien con uno mismo hace que se esté bien con los demás.
Si quieres encontrar o generar líderes conscientes en tu empresa, en Kilpatrick podemos ayudarte a lograrlo con nuestros expertos en Recursos Humanos.