Reskilling y Upskilling: Qué Son y Por Qué Son Procesos Importantes para Aplicar en la Empresa

¿Formar a un empleado para que realice una nueva tarea en un nuevo puesto en la empresa o bien mejorar sus competencias para optimizar el trabajo que ya realiza? Estos son enfoques que cobran fuerza hoy al momento de abordar la formación de los colaboradores de una organización: hablamos del reskilling y upskilling.

Pero, ¿en qué consisten realmente?, ¿por qué son tan importantes?, ¿cómo se pueden implementar?, ¿cuál es la más apropiada de elegir? En este artículo nos centraremos en responder estas y otras preguntas relacionadas al reskilling y upskilling. Sigue leyendo y no te pierdas detalle sobre esto y así puedas tomar una decisión informada.

Reskilling y Upskilling: ¿Qué Son?

Eventualmente se podrían confundir, pero son estrategias o procesos de desarrollo de habilidades que apuntan a objetivos diferentes. Mientras el reskilling (que es una suerte de recapacitación) se enfoca en formar a un trabajador para que adquiera nuevas competencias y así asuma nuevas responsabilidades o se integre a un nuevo puesto en la misma empresa, por ejemplo. El upskilling (que se refiere al perfeccionamiento), en tanto, apunta a identificar las habilidades que los empleados deberían reforzar y mejorar para optimizar el trabajo que ya efectúan y adaptarse a los cambios, sobre todo tecnológicos.

Según un estudio realizado por el portal de empleos latinoamericano Bumeran, realizado a 4174 personas relacionadas a Recursos Humanos, determinó que el 67% de ellos consideraban que la opción más efectiva para el desarrollo profesional de las personas es mejorar y profundizar las habilidades ya existentes, es decir, aplicar upskilling, mientras que el 62% sostuvo que lo era la adquisición de nuevas habilidades o el reskilling.

¿Por Qué es Importante Mejorar las Competencias de los Empleados?

Son varios los beneficios del reskilling y upskilling en cuanto a que están dirigidos a mejorar las competencias de los empleados, y en ello cabe lo siguiente:

• Ayudan a hacer frente a la escasez de talento en México. Ya para 2023, según un informe de ManpowerGroup, a nivel mundial se llegó a una escasez global de talento del 77% siendo el más alto que se haya registrado. En cuanto a México, el porcentaje es de 69%, lo cual representa 4% más respecto a 2022. En este contexto de escasez de talento, un punto que los empleados valoran es el fortalecimiento de los procesos de formación (como los que dan el reskilling y upskilling), siendo de los motivos principales por los que una persona puede decidir quedarse en una empresa y, a su vez, generar compromiso.
• Permiten afrontar la digitalización que tenderá a excluir trabajadores no formados. El mundo cambia y las competencias que se demandan de los empleados también. En este sentido, la digitalización ha puesto un reto a las empresas y sus colaboradores que no están capacitados al respecto; poder poner atención a ello, con estrategias de reskilling y upskilling que los logre formar en ello, son útiles para enfrentar este desafío.
• Favorece el desarrollo y crecimiento profesional. Enfocarse en la capacitación y formación de los empleados es sinónimo también de crecimiento profesional de los colaboradores de una compañía, pues posibilita que puedan desarrollarse ampliamente en el ámbito laboral.
• Se genera un aumento de la retención de talentos. Poder retener a los empleados se vuelve crucial para las compañías. En este sentido, el upskilling y el reskilling son claves, ya que se dirigen hacia puntos importantes valorados por los empleados, que generan retención de talento como un ambiente de trabajo que fomente el crecimiento profesional como también el aprendizaje continuo.
• Existe una mejora de la cultura organizacional. Por último, estas estrategias ayudan a mejorar la cultura organizacional: al enfocarse en una cultura del aprendizaje e innovación continua en la organización (entendida como el aprendizaje individual y organizacional que apunta tanto a la adquisición como al intercambio de conocimientos, los que se priorizan, valoran y recompensan) ayuda a que se mejore la cultura organizacional en su conjunto.

Las Estrategias para Implementar Reskilling y Upskilling

Si consideramos que, según el McKinsey Global Institute (2022), de cara a 2030 un 14% de los trabajadores tendrán que cambiar o modificar su ocupación, el reskilling y upskilling cobran mayor fuerza como herramientas para hacer frente a esta realidad.

Por ello, saber implementarlo se vuelve fundamental y así poder ver sus resultados. Entre los puntos a considerar para su implementación están:

• Definir los objetivos. Es importante contar con metas claras, medibles y alcanzables a la hora de pensar en un plan de reskilling y upskilling.
• Reconocer y evaluar las competencias con mirada crítica. En este punto, es igualmente clave el perfil de conocimientos y capacidades técnicas que tienen los colaboradores y resulta necesario priorizar las brechas críticas encontradas. Para llegar a esta información, se recomienda efectuar una auditoría o diagnóstico de competencias entre los trabajadores y las áreas de la compañía que pueda ayudar a proyectar futuras necesidades dentro de la organización.
• Definir quién necesita reespecialización y quién necesita mejorar. Algunos trabajadores necesitarán mejorar o especializarse en sus labores, mientras que otros deberán recapacitar en otras áreas para cumplir otros roles en la organización. Detectar qué es lo que necesita cada uno es relevante para el éxito del plan de reskilling y upskilling.
• Involucrar al equipo. Dado que es un desafío para los trabajadores, es una buena idea incentivar al equipo a que sea parte de los procesos de capacitación y así fomentar su participación recalcando la importancia de hacerlo, que la empresa los apoyará y los beneficios que esto les reportará.
• Medir el progreso. Los objetivos trazados en un comienzo deben ser medidos con posterioridad y de forma regular. Esto sirve, por ejemplo, para saber cuáles modalidades de capacitación son más efectivas, como también para brindar retroalimentación a los empleados sobre el proceso de reskilling y upskilling como asimismo escuchar sus comentarios.

Conclusiones

En un entorno laboral de cambios acelerados y creciente digitalización, el reskilling y el upskilling son estrategias clave para garantizar la sostenibilidad y competitividad de las organizaciones. Mientras el reskilling permite a los empleados adquirir nuevas competencias para asumir roles distintos, el upskilling perfecciona habilidades actuales para mejorar el desempeño y adaptarse a los cambios.

Estas herramientas no solo cubren brechas de habilidades, sino que impulsan la retención de talento, fortalecen el compromiso de los empleados y fomentan una cultura de aprendizaje continuo. Implementarlas con objetivos claros y evaluación constante prepara tanto a las personas como a las empresas para los retos del futuro, sentando bases sólidas para un crecimiento sostenible y competitivo.